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Caracas, 08 Sep. AVN.- Nuevos estudios con monos demuestran que una dosis de una vacuna experimental contra el ébola puede otorgar una pronta protección, sin embargo el efecto disminuye a menos que los animales reciban un refuerzo hecho con un proceso distinto.
De acuerdo con un estudio publicado, la inyección de esta vacuna, basada en un virus del resfrío en los chimpancés y administrada a simios de laboratorio, les proporcionó una protección completa a corto plazo y parcial a largo plazo, contra el ébola, que ha dejado casi 3.000 muertos en el oeste de África, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La investigación comprobó que los animales a los que se les inyectó el refuerzo, a propósito de un nuevo esquema de vacunación, desarrollaron una inmunidad duradera.
En ese sentido, una nota publicada en la página web de Telesur, reveló que se trata de la primera demostración de una protección duradera por una vacuna contra el virus 'Ébola Zaire', la cepa de la actual epidemia.
Al respecto, las pruebas en humanos, que se anunciaron a fines de agosto, constituyen la primera etapa del proceso de validación de la vacuna dividido en tres. Estos ensayos se llevan a cabo en sujetos sanos para verificar si toleran bien la vacuna y si esta logra una buena respuesta inmunitaria.
Paralelo a ello, la Unión Africana (UA) se reunirá hoy en Addis Abeba, capital de Etiopía, en busca de una posición común de los países del continente para combatir más eficazmente la actual epidemia de ébola.
Durante el encuentro en la capital de Etiopía los representantes de la UA intercambiarán acerca de la suspensión de vuelos y el cierre de las fronteras marítimas y terrestres, así como de los daños sociales, políticos, culturales y económicos ocasionados en la región por la epidemia y la estigmatización de los países afectados y sus ciudadanos.
La pasada semana, la Unión Africana reclamó la atención internacional por los escasos recursos asignados y disponibles en las naciones con mayor cantidad de muertos por la epidemia.
Acerca del ébola
Este virus se introduce en la población humana por contacto estrecho con órganos, sangre, secreciones u otros líquidos corporales de animales infectados.
Se disemina de persona a persona por el contacto con la sangre, tejidos, secreciones y fluidos corporales de la persona infectada.
También se trasmite por el contacto con equipo médico contaminado, como agujas. Además, se ha señalado la transmisión a través de relaciones sexuales sin protección, hasta siete semanas después de la recuperación.
El inicio de la enfermedad es súbito: comienza con fiebre, dolores musculares, de garganta y de cabeza intenso, así como erupción en la piel. Puede haber falla renal o hepática, y en una etapa tardía de la enfermedad, sangramiento tanto interno como externo.
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