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Caracas, 02 Abr. AVN.- El 2 de abril de 1982 contingentes militares argentinos desembarcaron en las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur -usurpada por los británicos desde 1833- con el fin de recuperar su soberanía.
La decisión de ir a la guerra fue tomada por la dictadura militar de Argentina, que estaba al mando del poder en el país suramericano desde 1976 y ya se acercaba a su final. El Gobierno de facto, en ese momento al mando del general Leopoldo Galtieri, emprendió una fuerte propaganda mediática para justificar la guerra.
La dictadura no midió las consecuencias que traería este conflicto bélico en las islas, ubicadas en el océano Atlántico Sur y pertenecientes al mar epicontinental argentino, a unos 464 kilómetros de Argentina.
El 14 de junio, tras 73 días de guerra, quedó en evidencia el aventurerismo del Gobierno de facto en Malvinas, que buscaba lavar su imagen de las ya conocidas violaciones a los derechos humanos (30.000 desaparecidos). El objetivo no se alcanzó: las tropas argentinas se retiraron de las islas y las mismas siguieron en manos de los británicos.
El saldo de este lamentable conflicto bélico fue de 649 argentinos muertos y 1.082 heridos; mientras que las víctimas fatales del lado británico alcanzó a 255 y 775 heridos.
Desde 2002, Argentina conmemora el 2 de abril el Día del Veterano de Guerra y los Caídos en la guerra de Malvinas.
Zona militarizada
En la actualidad, el Gobierno de la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, reclama, a través de diferentes canales diplomáticos, que se restituya la soberanía de ese archipiélago al país suramericano.
Argentina pide a Gran Bretaña respetar la resolución 2065 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), aprobada el 16 de diciembre de 1965, en la que el organismo internacional reconoció la disputa territorial e instó a ambas partes a iniciar negociaciones para encontrar una solución. Hasta la fecha, la nación europea se ha negado a dialogar.
El Ejecutivo argentino ha denunciado además que Gran Bretaña mantiene militarizada las islas Malvinas, donde el gobierno británico utiliza su base para realizar pruebas con misiles.
En las islas hay 1.060 efectivos militares, según las últimas cifras oficiales de Reino Unido, dadas a conocer el 5 de marzo pasado por el secretario de Defensa británico, Mark Francois. Ese número significa que hay casi un soldado cada dos isleños, si se consideran los datos del censo realizado en 2012 que reveló un total de 2.563 habitantes estables, reseñó Télam.
Además de los efectivos, la militarización incluye armamento pesado, aviones de guerra, la presencia constante del buque de guerra británico HMS Clyde y la visita de destructores y fragatas.
Valor estratégico
El director de Veteranos de Guerra de Malvinas de la provincia argentina de Río Negro, Rubén Víctor Pablos, explicó recientemente a un diario local el valor estratégico de las islas usurpadas.
"Nos siguen usurpando y robando recursos. Las islas son un punto estratégico, es un paso bioceánico natural. Debajo de la superficie marina está la reserva de petróleo más grande que todavía no se puede explotar pero en 30 ó 40 años se hará", indicó.
En marzo de 2013, el Gobierno local de las Malvinas, realizó un referendo, que aunque no fue reconocido por la ONU si lo avaló Inglaterra.
En esa consulta, los ciudadanos de Malvinas, introducidos por el Reino Unido, decidieron mantener su estatus político como territorio británico en ultramar.
En marzo pasado, la presidenta argentina denunció el doble rasero de Reino Unido, luego que ese país no reconociera el referendo celebrado en la República Autónoma de Crimea, en el que los ciudadanos de ese territorio, antes perteneciente a Ucrania, decidieron adherirse a Rusia.
"Si carece de valor el (referendo) que hizo Crimea, a escasos kilómetros de Rusia, mucho menos (valor tiene) uno de una colonia de ultramar (Malvinas) a más de 13.000 kilómetros de distancia", enfatizó la Presidenta, durante una visita a Francia.
Apoyo mundial a Argentina
La lucha de Argentina ha recibido el apoyo de los países de la región, que se han pronunciado a favor de la soberanía de la nación suramericana sobre las Malvinas en diferentes organismos de integración como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba) y la Organización de Estados Americanos (OEA).
Ese apoyo se proyecta más allá de la región. Destaca el respaldo que también han brindado el Movimiento de Países No Alineados (MNOAL) Cumbre América del Sur-África (ASA), el Grupo de los 77 y China, las Cumbres Iberoamericanas y las Cumbres de Países Sudamericanos y Árabes.
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