Caracas, 20 Dic. AVN.- La disposición expresa de alcaldes y gobernadores de la oposición venezolana de trabajar en conjunto con el Gobierno Bolivariano, dirigido por el presidente Nicolás Maduro, demostró una vez más que el fascismo nace de los medios de comunicación privados, que insisten en promover las tesis de la supuesta ingobernabilidad del país, la división de los venezolanos y la crisis económica.
Aún cuando los partidos Acción Democrática (AD), Comité de Organización Política Electoral Independiente (Copei), Movimiento al Socialismo (MAS) y Un Nuevo Tiempo (UNT) sumaron 44 alcaldías, más del 58%, de las 75 ganadas por la derecha en las elecciones locales del pasado 8 de diciembre -en las que el chavismo arrasó en 255 de los 335 municipios- las empresas de comunicación utilizan exclusivamente a organizaciones políticas minoritarias, como Primero Justicia y Voluntad Popular, para exaltar su posición fascista de desconocimiento del Gobierno constitucional y al pueblo que lo respalda mayoritariamente.
Primero Justicia, presentado por los medios como el principal partido de oposición, alcanzó solo 6 alcaldías equivalente al 8% de las obtenidas por la llamada Mesa de Unidad Democrática (MUD); sin embargo, sus voceros gozan de una desproporcionada cobertura en pantallas y páginas.
"Oposición pide diálogo sincero a Nicolás Maduro", "Alcaldes pidieron a Maduro cese de gobiernos paralelos", son los titulares que este jueves decoraron las primeras planas de los diarios El Universal y El Nacional, seguidos de notas de prensa en las que no se reflejó que el principal promotor del encuentro con la derecha fue el Presidente, quien recibió el respeto y el reconocimiento de la mayoría de los asistentes, detalle obviado también por ambos medios.
En una importante cita en el Palacio de Miraflores, Maduro conversó con 68 alcaldes de oposición y los gobernadores de Lara y Amazonas, Henry Falcón y Liborio Guarulla, respectivamente, a quienes recordó que era imperativo el respeto a la Constitución y el cumplimiento del Plan de la Patria, convertido recientemente en ley de la República por la Asamblea Nacional.
"Lo he dicho y lo reitero: quiero trabajar de manera mancomunada con los tres niveles de gobierno, porque usted y yo tenemos el mismo punto de coincidencia que es solucionarle los problemas a la gente", dijo la alcaldesa de la capital zuliana Maracaibo, Eveling Trejo, del partido Un Nuevo Tiempo (UNT), posición a la que se le sumaron, entre otros, los alcaldes del municipio Rivas Dávila del estado Mérida, Julio Rosales, de AD, y del municipio San Rafael de Onoto de Portuguesa, Edgar José Miranda, de Copei.
"Desde esa trinchera cuente conmigo", manifestó Julio Rosales, quien expresó su emoción por el contacto directo con el Jefe de Estado.
Por su parte, Edgar José Miranda le obsequió un presente —dado por una niña de su localidad— al Primer Mandatario y le dio un abrazo como "símbolo ante el mundo de la democracia y respeto a las ideologías".
Ante esta expresión de respeto y acercamiento, Maduro respondió: "Quién quiera paz, tendrá paz y cada quién con su visión del mundo, y cuando haya elecciones nos medimos pues".
Esos puntos de encuentro y voluntad mutua de trabajo conjunto fueron silenciados por los medios privados, porque -tal como hacen al escoger los partidos de derecha que responden a su discurso- de esta reunión fueron enaltecidas las declaraciones repetitivas de las tesis mediáticas del caos, tales como las del alcalde del Municipio Sucre de Miranda por el Partido Primero Justicia, Carlos Ocariz, quien en su intervención pidió no hablar de los problemas locales sino de la "división del país".
En esta misma línea hablaron los alcaldes por el partido Voluntad Popular de El Hatillo (Miranda), David Smolansky, y de San Cristóbal (Táchira), Daniel Ceballos.
Smolansky repitió el machacado discurso de que en el país no hay libertad de expresión, esto lo dijo en una reunión transmitida en vivo sin interrupciones por el canal de televisión y por las emisoras de radio del Estado venezolano.
Ceballos por su parte rechazó el Plan de la Patria y hasta acusó al Presidente Maduro de promover la xenofobia contra los colombianos, esta acusación fue rebatida por el Jefe de Estado, quien recordó que ha sido la derecha venezolana la que ha promovido la xenofobia con el vecino país y que la Revolución Bolivariana ha fortalecido las relaciones con Colombia basada en la hermandad histórica entre ambas naciones.
En lo referente al Plan de la Patria, Maduro ratificó su exigencia de respeto a su investidura como Jefe de Estado y al plan nacional del Ejecutivo respaldado por el pueblo venezolano en las tres últimas contiendas electorales.
Una vez más, en su empeño de ser el principal factor político de la derecha venezolana, el tratamiento de los medios privados evidencia su desfase y falta de coherencia con la realidad política y social venezolana. Desde hace 15 años hablan de otro país, uno que presentan destrozado y al que ponen como remedio una salida fascista.
Ana Navea AVN
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